45 Capítulo Dieciséis Dios Ama Sanar En este librito, no puedo compartir todos los maravillosos Milagros de sanidad que he visto, pero cada día trae maravillosas oportunidades para orar y ayudar a la gente. La habilidad para hacerlo no tiene nada que ver con dones espirituales especiales. Cada creyente en el cuerpo de Cristo tiene la misma medida del Espíritu Santo47 y Juan 14:12 declara que el creyente puede hacer las mismas obras de Jesucristo y aun mayores.48 Marcos 16:15-20 es aun mas provocativo estas señales seguirá a aquellos que (!hacen una cosa!) creen. Esconderse detrás de una excusa a menudo escuchada: “Bueno, usted tiene un ministerio de sanidad;” es negar la obra de Cristo en cada creyente en la misma medida completa del Espíritu Santo. Somos sin excusa para pararnos ante Dios y reportar por nuestro deber con fe. ¡Y en cada cosa que creamos carecer, siempre podemos pedirle y El suplirá todas nuestras necesidades en Jesucristo!49 Al estar escribiendo esta sección del folleto, llamó una dama que había estado incapacitada de su espalda por semanas, incapaz de levantarse para tener cuidado de su familia. Ella había colapsado con una 47 El Espíritu es dado en una medida completa sin acepción de personas (Juan 3:34; Romanos 2:11; Efesios 6:9; Colosenses 3:25; 1 Pedro 1:17). 48 Juan 14:12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree [lit. está creyendo], las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. 49 Filipenses 4:19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. condición anémica. Su iglesia había orado, impuesto manos sobre ella, etc. Pero mas que todo oraban porque ella fuera capaz de soportar, y hablando cosas ridículamente sin fe tales como que Dios estaba tratando de enseñarle algunas cosas. Yo casi grité cuando escuché esto. ¡Dios no trae el mal para enseñarnos algo! No niego que podemos aprender cosas de nuestros errores, y aun de nuestra incredulidad, pero no ose acusar a Dios de iniciar maldad contra Su pueblo para enseñarles alguna cosa. Debemos tomar a Dios en Su Palabra y caminar en la sabiduría que es de arriba en lugar de tratar de consentir la enfermedad con poderosa incredulidad, y correr a la profesión médica antes de preguntarle al Gran Cirujano Jesucristo.!Dios siempre está dispuesto a sanar a sus hijos! Oré por teléfono por esta dama, reprendí un espíritu de muerte, ordené su salud y fuerza para regresar, y que su sangre fuera completada en el nombre de Jesucristo. Simplemente dije lo que el Señor me mostró para esta mujer. Mas tarde supe por su marido, que inmediatamente Después de la oración, ella se levantó de la cama, y no se volvió a acostar excepto para dormir a la noche siguiente. ¡Al día siguiente ella aun caminó dos millas llena de alabanzas para Dios! Desde entonces, los doctores han estado asombrados. Lo que ellos predijeron que tomaría seis meses o mas para restaurar su sangre a lo normal, tomó menos de dos semanas. Y no sucedió con suplementos con hierro o medicina. ¡Sucedió por el poder de Dios por la fe!
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