8 ¿Así que como guardamos el pacto? En pocas palabras, lo guardamos manteniendo una relación básica de amistad con Jesucristo. Eso es de lo que se trata mantener nuestra lámpara llena de aceite (Mateo 25:1-12) y también es a lo que se refieren todas las otras parábolas del Reino en Mateo 13. Estudiemos estas parábolas del Reino y dejemos que se asienten en nuestros corazones, y podamos crecer para conocer que el Reino de Dios15 realmente es la presencia personal del Rey, Jesucristo. Así que aquí hoy unos ejemplos que ayudan a ilustrar lo que quiero decir. Los dos conceptos que debemos entender son: 1. Cada creyente tiene autoridad espiritual sobre las tinieblas (incluyendo enfermedad y dolencia) 2. Nuestro escape de la esclavitud de las tinieblas espirituales estriba en escuchar y obedecer la Voz del Señor. 15 El Reino de Dios y el Reino del Cielo son considerados como uno solo. Jesús los citó juntos en Mateo 19:23-24 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. Una excelente forma para pensar en el Reino es esta: El Reino es la presencia del Rey Jesucristo. Así que entrar en Su presencia es entrar en el Reino. ¡Cuando entendemos que el Reino es Su presencia, entonces las parábolas de Mateo 13 y de otros lugares toman un maravilloso sentido! Debemos buscar primeramente el Reino de Dios y Su justicia, y todas nuestras necesidades son suplidas (Mateo 6:33). ¡En donde mas puede uno recibir tales bendiciones excepto que ellos laboren para entrar a Su reposo, Su Presencia, Su Reino! El Evangelio del Reino el cual Jesucristo vino a predicar es el Evangelio de Su presencia, y será cuando sea predicado a través de todo el mundo, que el Rey regresará (Mateo 24:14).
RkJQdWJsaXNoZXIy MTU1OTMyMg==